#1 Nuestra visión sobre la deforestación
Una mirada al mundo en el que vivimos indica que la demografía y la creciente urbanización, el modo de consumo de los países ricos y de los países en vías de desarrollo, así como la presión ejercida por las poblaciones locales son las principales razones de la deforestación mundial. Las consecuencias de la deforestación son múltiples y afectan a todo el planeta en el fenómeno llamado cambio climático. Hablar de eso está bien pero no es suficiente. Tenemos que actuar juntos para luchar contra la deforestación y reforestar las áreas degradadas mientras proponemos alternativas de desarrollo viables para las poblaciones locales.
Desde 2005, la fundación Ishpingo ha estado implementando un modelo de desarrollo sostenible basado en la agrosylvicultura participativa, en el que los agricultores reforestan sus tierras con especies maderables y frutales.
El impacto de esas acciones de reforestación es triple :
Permiten a las poblaciones locales practicar el autoconsumo a través de la producción de frutas, de madera de construcción y de ingredientes utilizados para la medicina tradicional.
Sus ingresos, y entonces su nivel de vida, aumentan significativamente, notamente gracias a la vente de una parte de la cosecha de los árboles frutales a nuestra estructura de venta.
Al plantar árboles contribuimos también a secuestrar el CO2 (dióxido de carbono) y de ese modo, limitar el cambio climático global del planeta.
Al contrario de muchas organizaciones, la fundación Ishpingo está convencida que los resultados positivos a largo plazo en los proyectos de reforestación son posibles solamente cuando las poblaciones locales están capacitadas y participan de manera activa al proyecto. Solo su concientización y su compromiso garantizarán la sostenibilidad y la reproducibilidad de las acciones que adoptamos.